LO
SENCILLO NO ES COMPLICADO:
Esta
entrevista, es a una persona que conozco hace muchos años. A lo largo de estos,
nuestra profesión y la vida nos ha ido llevando por lugares paralelos. Siempre
ha sido para mí una persona interesante y me explico: todos tenemos cosas
importantes que aportar, no puedo entrevistar a todo el mundo, pero esta
persona desde siempre a inspirado en mi una fragancia de bondad. Hay personas
que conoces que te transmiten cosas, energías, valores, etc…él impregna bondad,
buen rollo. En el fondo creo que es, como dirían los franceses un “bon vivant”,
una persona alegre que le gusta disfrutar, que no le gusta molestar y que
no le gusta que invadan su espacio… Pero prefiero que sea él quien nos
vaya describiendo a través de su viaje hacía su YO:
‹‹Bueno
empiezo la entrevista presentándome:
Me
considero una persona muy básica, muy normal. No me gustan que me compliquen la
vida, me defino cómo una persona en tránsito. Creo que soy buena gente, no
trato mal a nadie. Me alejo mucho de las personas tóxicas y sobre todo no me
gusta entrar en peleas, no soy nada guerrillero, pero eso si, lucho por lo que
quiero a mi manera, con mis armas. Mis orígenes son de una familia humilde pero
que vivía en una ciudad. Mi madre era una mujer sencilla, muy buena persona,
(
Hago un paréntesis para confirmar que se le ilumina la cara al hablar de su
madre de una manera especial, continuamos)
mi padre era un
buscavidas, un hombre libre, no le gustaba trabajar para nadie y se buscaba la
vida para trabajar y buscar el dinero para la familia, aunque recuerdo muchas
veces a mi madre en el balcón de casa esperando a que llegara con
dinero para ir a comprar, vivíamos al día, pero con un poder adquisitivo bueno. Tengo
dos hermanos uno con el que tengo una gran relación y otro con el cual la
relación es nula, lo defino cómo “raro”.
El
mejor recuerdo que tengo de cuando era niño fue una etapa en al que mis padres
alquilaron una torre a la que íbamos los fines de semana y gozaba de mucha
libertad… el peor recuerdo que tengo es cuando mi padre enfermó de una
depresión. Yo era un adolescente. Vino la crisis del petróleo y vi cómo una
persona tan capaz, tan decidida, se hundía, cayó en una depresión profunda y de
repente mi mundo, ese mundo que conocía, de un buen colegio, la torre, que no
nos faltara de nada, se derrumbó como un castillo de naipes. A tal punto fue
duro que llegamos a tener la situación de no tener un techo dónde refugiarnos.
Gracias a unos tíos que nos alojaron hasta que pudimos irnos a vivir a casa de
mis abuelos
Pasamos
de “nuevos ricos” por la vida que llevábamos , sin ahorrar y viviendo bien y al
día, a tener que ponerme yo a trabajar a los 13 años, en plena adolescencia y a
dejar aquella torre dónde me sentía tan libre por no poderla pagar. Mi vida se
truncó..
Recuerdo
con especial cariño el primer día que salí de mí primer trabajo. Me sentía
útil. Fue un orgullo llegar a casa y entregar a mi madre aquella semanada. Durante unos años pasé
por varios trabajos de poca monta hasta que encontré uno ya un poco más serio,
un oficio.
Me
definiría como una persona introvertida, tímida, reservada si quieres, pero
buena gente, honrado y cariñoso.
La
felicidad para mí es el bienestar, es tener estabilidad y muy importante tener
estabilidad emocional
No
tengo la familia que planeé desde un principio. Me separé. Pero tengo muy buena
relación con mis hijos, incluso uno vive conmigo a temporadas. Tengo pareja,
una persona con la cual hemos coincidido en muchas cosas y nos acompañamos y me
siento feliz con ella. No aspiro a tener la familia que deseaba hace años,
tendré otro tipo de familia. No pudo ser…..
Pocas
veces me meto a opinar sobre lo que me cuenta el entrevistado, pero en este
caso no puedo pasar de largo. Doy fe que luchó y aguantó mucho para que su
familia se mantuviese junta. Aguantó hasta límites que para llegar a ellos hay
que ser o muy hombre para aguantar que te anulen de esa manera o la lucha por
el sueño de una familia le hizo hacerse fuerte hasta que dijo basta de
humillaciones. Me consta que ese “basta” le dolió en el corazón. Me
puedo imaginar que sentía su corazón para romper su sueño y marchar de casa,
pero hay que estar en la piel del otro para sentirlo.
Seguimos
con la entrevista:
Debido
a todo lo que me supuso mi separación, dejar mi casa de siempre, dejar a mis
hijos (ya mayores de edad y bien colocados aunque vivían con nosotros), irme a
vivir solo por primera vez en mi vida, han sido 5 años muy duros. El marchar me
supuso dejar de aguantar un trato que rallaba lo inaguantable, lo permitido, lo
razonable, pero me fui a “mi condena” la soledad, lejos de los míos de mí
circulo, de mí ciudad y eso hace sentirte desubicado, solo y triste. Pensad que fue el día más triste de mi vida, incluso más que la muerte de mis padres.
Un día de
después de estos 5 años conocí a mi actual pareja y el día que hablé con ella y
decidimos salir juntos, mi autoestima subió de golpe ¡ vaya subidón! Iba por la
calle flotando, empecé a sentir que valía más de lo que pensaba, me sentía
vivo, sentía algo que no sentía hace mucho que le importaba a alguien.
Si
tuviese que dar un consejo a un niño o a un adolescente le diría lo mismo, haz
caso de tus padres, nadie te va a querer como ellos, no seas orgulloso y
escúchales.
Si
pudiese cambiar algo en mi vida, sería poder casarme con la persona que fuese y
ser felices. La vida me ha llevado a dónde estoy, no domino nada
La
felicidad es una utopía, son momentos que duran muy poco, realmente pienso que
hay momentos felices, pero no es estables en el tiempo. Es una visión muy
realista, nunca te sientes satisfecho, la vida están sencilla y tan complicada
a la vez. Siempre te viene alguna desgracia que hace truncar esos momentos
digamos agradables.
Nunca
pienso que haga nada extraordinario cuando ayudo a los demás, me parece que es
lo normal, si está en mi mano o tengo el conocimiento o la experiencia y ello
le va bien a alguien nunca pienso que haga nada especial, doy lo que tengo.
En
este tiempo si que he notado una cosa que hacia tiempo que no sentía, disfruto
mucho más de amistades antiguas, les dedico tiempo, sin forzar las cosas, pero
la soledad hace que luego aprecies mucho más u a los demás.
El
motor de mi vida son mis hijos, mi pareja y mi círculo de amistades, sentirme
querido y valorado como persona, como padre, como amigo y como pareja me hace
seguir adelante. Lo puedo decir con rotundidad lo peor para mí es la soledad y
la vejez es una tristeza que cala los huesos.
Me
dirijo hacia una jubilación cercana, sin muchas pretensiones, quiero vivir
tranquilo y que me dejen vivir a mí manera. Yo no molesto a nadie. Pienso en
ello, se me acortan los años, cada vez puedo pensar menos en eso de dentro de 20
años…. Ya no podré hacer según que cosas, pero no me obsesiona, he ido
fundiendo muchos cartuchos en esta vida.
A veces pienso en la muerte, no me da
miedo, si que de joven pensaba que yo ya no estaré y la vida seguirá y pienso
que con el tiempo los tuyos se van olvidando de ti, pero es ley de vida. No me
preparo de ninguna forma especial, lo único que me gustaría es no ser un lastre
para nadie.
Agradezco mucho a esta persona su sinceridad, la oportunidad de escucharle y de aprender muchas cosas de el. Que bien poder viajar con vosotros. GRACIAS!!
Que pasada!! Me ha emocionado nucho su sencillez.
ResponderEliminarGracias tete xq me haces reflexionar con estas histórias.